lunes, 7 de julio de 2008

¿Capaces o Incapaces?

"La principal tarea de una democracia es preparar personas capaces de utilizarla": Savater

La democracia es un artefacto humano, una obra de arte social: nadie nace siendo ciudadano o demócrata. Se deben forjar ciudadanos capaces de aprovechar los derechos y garantías de la democracia de una manera crítica y participativa, donde las personas sean protagonistas de la vida democrática.
"La educación es el primer gobierno que sufrimos de los otros, y nos sirve para ser capaces luego nosotros de gobernar. Se educa para ser un ciudadano y luego para la vida; la capacidad de cada cual dirá lo que una va ser dentro de la sociedad, por la sociedad y con la sociedad. Educar ciudadanos es la primera tarea política de una democracia, hay que formar ciudadanos capaces de gestionar" dice Savater.
La importancia de la educación en una democracia, se ejemplifica, poniendo a la gente a pensar en que esa persona a la que se está educando pudiese ser de quien dependería el destino de todos en un futuro, la encargada de tomar decisiones y medidas que afectarían a los demás para bien o para mal, argumentando que se debe tomar en cuenta que una democracia también los ignorantes votan.
"Un ignorante es aquel ser que es incapaz de hacer inteligibles sus demandas sociales y de entender las demandas sociales que otros le hacen, es decir, aquella persona que no es capaz de persuadir ni de ser persuadido, ese es el verdadero ignorante, el que no entiende una argumentación, el que no comprende el porqué de atender las razones o exponerlas". No hay ninguna humillación en cambiar nuestras ideas cuando hay buenas razones para ello. Ceder ante razones mejores que las que uno tiene, es la forma de un ser racional. La capacidad de argumentar, ofrecer razones, recibirlas y comprenderlas, eso es parte fundamental de la educación que deben recibir las personas dentro de una democracia.